martes, 29 de julio de 2014

L'Illa Roja

Pero que preciosa que es la Costa Brava, no me canso jamás de ella, y siempre puedes descubrir nuevas calitas, donde colocarte tus gafas de buceo y ha ver pececitos un buen rato. Es uno de esos pequeños placeres que me encanta hacer en verano.

Esta vez fuimos por recomendación de un amigo a l'Illa Roja, un verdadero paraíso os lo aseguro. La cala se divide en dos separadas por una gran roca roja que es la que da nombre a la cala, os encontrareis con una primera cala más grande y nudista y, otra más pequeña y también nudista, ja, ja, nosotros que somos algo pudorosos nos quedamos con nuestros bañadores, pero no eramos los únicos, aunque si de los pocos.




La cala como podéis ver es un verdadero paraíso, a tan solo un par de horitas de Barcelona da la sensación de estar en otro mundo. Da gusto sumergirse en esas aguas transparentes y coger energía para toda la semana ¿no os parece?

Os lo recomiendo de todas todas.

Platja L'Illa Roja se encuentra en la localidad de Begur, en la Costa Brava Centro, en la comarca Baix Empordà.

martes, 22 de julio de 2014

Ceviche 103

Con estos calores que están haciendo, solo apetecen cosas bien fresquitas, platos refrescantes que nos refrigeren un poco por dentro.

Así que aqui os dejo una propuesta muy fresquita en todos los sentidos.

Ceviche 103, ¿con este nombre, os imagináis cual es la especialidad? ¿no?, 1, 2 , 3 , responda otra vez... ja,ja, pues el Ceviche. Me encanta con esa maceración tan fresca con limón, cilantro y no se que más, pues bien y aquí encontareis una variedad muy interesante.

 

El lugar como os comentaba es también muy fresco, sillas y mesas de colores, cuadros con mensajes muy salaos, barra con un chef confeccionando ceviches, todo con bastante buen gusto.


También tienen un segundo piso donde se encuentran los baños y una sala a modo de privado donde hacer cenas o reuniones, en la más absoluta intimidad.



Para beber nos pedimos una cerveza peruana, siempre nos gusta probar las cervezas de otros sitios, y una Chicha morada, que no tenía ni la más remota idea de que era esto, pero suena bien ¿no os parece?, solo os diré que es una bebida casera sin alcohol y muy rica.


Nos trajeron un pequeño aperitivo mientras esperábamos los primeros de puré de patata con salmón marinado con una salsita, que no sabría describir, pero que el conjunto estaba muy rico.


Y llegaron los primeros, un ceviche clásico, cubos de pescado marinados en leche de tigre y juliana de cebolla, con un buen trozo de moniato en su cúspide y maíz de distintos tipos, ummm espectacular.


También pedimos una ensalada de lechuga con langostinos al Panko, (que no es más que un rebozado de toda la vida), llevaba un aliño de lo más fresquito con lima.


Los segundos tardaban bastante en salir, así que para ir haciendo tiempo pues un Pisco Sour, una buena forma de esperar, no?


Por fin, llegaron el Cochinillo crocante con Tacu Tacu de lentejas y chutney de rocoto y tomate, muy, muy rico, sobre todo el Tacu Tacu, me encantó, pero para morirte de la envidia lo que yo me pedí.


Lubina en salsa chupe con patatas nuevas salteadas al ají amarillo, estaba espectacular, increíble, con un puntito picante ideal de la muerte, simplemente me encanto.


El postre no lo teníamos claro estábamos cerca del Bitte y nos apetecía ir allí para hacer el postre y los cafés, pero cuando la chica comenzo a decirnos lo que tenía finalmente cayó el Dulce de leche con merengue, umm que rico, nos hizo recordar a esos caramelos de cafe con leche que creo que aún venden por ahí. Riquísimo, además el merengue nos encanta, así que acierto asegurado.
 

Y así sin más, volvimos nuevamente al asfalto a achicharrarnos, aunque eso si, bien fresquitos por dentro.

Encasillando
Si te gusta el ceviche, este es tu sitio.

Precio medio x persona: 35 €

c/ Londres, 103
T. 93 209 88 35


viernes, 18 de julio de 2014

Formentera, un paraiso a la vuelta de la esquina.


Y después de no se cuantísimos años diciendo, este año nos vamos a Formentera, por fin llego el año en el que nos fuimos. Cinco maravillosos días de playas paradisiacas, buen comer, descanso y tranquilidad.

Llegamos a Ibiza a primera hora de la mañana con un regimiento de gente fiestera, nosotros nos íbamos a la tranquila Formentera, así que después del desayuno nos metimos en el barquito rumbo a la isla soñada. Una vez allí y con nuestro pequeño coche, tocaba turno de encontrar el hotel, Hostal Aigua Clara, un hostal monísimo de la muerte, nos toco una especie de bungalow delante mismo del mar, un gustazo levantarse por la mañana vamos.


Nosotros nos alojamos en la zona de Migjorn, una zona super tranquila, con una pasarela que de madera por la que poder pasear y descubrir chiringuitos super chulos, para ir a tomar algo, como el Blue Bar o el Gecko Beach Club.



Al día siguiente nos levantamos pronto, y fuimos rumbo a La zona de Ses Salines, que según nos habían dicho es donde están las playas más chulas de toda la isla y tenían razón, son increíbles, playas paradisiacas de arena blanca y agua hiper mega cristalina, aunque la tranquilidad no seria lo destacado de esta zona, nosotros dejamos el coche en el último parking  y comenzamos una larga caminata, queríamos ir hasta S'Espalmador, pero había bandera roja y no pudimos ir.





Tengo que decir, que nosotros jugábamos con ventaja, si, si, como os cuento, porque coincidíamos allí con una amiga que va cada año, así que nos iba diciendo aquello que no podíamos perdernos, que si la puesta de sol, en el PirataBus, que si a tomar el sol al Calò des Mort, una calita ideal como ella sola, eso si para ir tempranito a coger sitio, porque con 8 personas ya está llenísima.




Que si a comer , a Can Rafalet, un clásico entre los clásicos de la isla, con una terracita de lujo donde disfrutar del mar y de la comida, claro.


Nosotros nos metimos entre pecho y espada, un pescadito al horno que estaba de vicio, con su patata, cebollita, tomate, en fin, que no le faltaba de na, de na.


Y de postre una Greixonera, postre típico de la isla , donde se aprovechan ensaimadas y croissants de días anteriores y se hace una especie de pudding riquisimo.

El sitio no es que sea muy barato, unos 45 € por persona, pero vale la pena.




Al día siguiente, nueva playa a descubrir, hay un montón por toda la isla y todas increíbles, Cala Saona no os la podéis perder tampoco y por supuesto visita obligada al Cap de Barbaria, precioso.


Nosotros continuamos el día con una comida super especial, nos habían recomendado un Rest. increíble el Pelayo, así que el domingo, visita obligadisima y con reserva eso sí, porque se pone hasta los topes.

Los domingos hacen menú paella, así que si vas ya sabes lo que comerás, una paella gigante para todos los presentes, es un espectáculo en si, te levantas con tu cervecita, vas a ver como la van preparando, ahora un remonjoncito en la playa, vuelves a ver como la llevan, hasta que finalmente comienzan a repartir.



Y como os podréis imaginar, riquísima, nos supo a poco y todo.

Pero lo mejor de todo, es cuando ya estas terminando, un grupo de música comienza a tocar y a poner el toque de lo más animado, así de esta forma, se va formando una zona de baile, que casi enlazas con la cena. Una pasada.






Y esta fue nuestra pequeña escapada.

Una isla increíble como me habían dicho, ideal para ir fuera de temporada, para apreciar toda su esencia.

Happy weekend!!!


lunes, 7 de julio de 2014

Rest. Rosal 34

Y aquí estamos de nuevo en la Calle Blai, descubriendo sitios nuevos.  Que le vamos ha hacer nos encanta chafardear y probar, y si encima es como Rosal 34, mejor que mejor, un descubrimiento de los buenos buenos.

Concretamente está en la calle Rose 34, un restaurante de tapas ligeramente apartado de la ruidosa calle Blai, con un interior bastante elegante y con una barra llena de pinchos muy bien elaborados.


Lo cierto es que tenían todos una pinta que no sabias por donde empezar, pero a la que nos animamos no supimos parar. Que si una bomba.


O de salmón ahumado con queso.


Aquí uno de carne con pimiento.


Un clásico, chistorra con huevo de codorniz.


La tortilla de patata, que no falla nunca, con su pimiento de padrón.


Croquetas de bacalao.


Un super montadito de mini burguer, huevo, patata, lechuga y tomate.


Y un montón más de palillos que fuimos acumulando, y es que estaban todos super ricos.
Lo mejor, pues el precio, todos a 1€, menos los que eran algo más largos y con una bolita decorativa al final que eran 1,50 €.

Super recomendable, vaya que si.

Encasillando
Montaditos ricos ricos.

Precio x persona: 12 € 


Rest. Rosal 34
C/ Roser 34, 08004 Barcelona
Telf. 93 3249046

martes, 1 de julio de 2014

Rest. Ten's

Seguro que  conocéis el Ten's, el restaurante de tapas del televisivo Jordi Cruz, ya hace bastante tiempo que funciona pero hasta hace un par de semanas no nos dio por ir a probar.

El Ten's está dentro del Park Hotel,  entras atravesando una pequeña barra y un pequeño pasillo que  se abre a un comedor amplio y claro, en el que y desde mi punto de vista "claro está", le falta calidez y personalidad.





Comenzamos con nuestro repertorio de tapitas, y es que no se si os lo he dicho pero aquí se come a base de pequeños platillos, algunos tan pequeños que cuando te los traen te da la risa, aunque después cuando empiezas a comer te das cuenta que no era tan minúsculo como pensabas.

Pues bien, comenzamos con unas paperinas de pescaito frito, que estaba riquisimo.


Continuamos con unos yakisoba con panceta ibérica, setas, langostinos y romero, nos lo trajeron en esta cajita que veis bien cerradita, lo cierto es que nos quedamos atónitos cuando la vimos, era realmente minúscula y no sabíamos si reír o llorar, finalmente la abrimos y comenzamos a repartir como buenos hermanos y tengo que decir que alucinamos, parecía la bolsa de Sport Willy, no paraban de salir y salir riquisimos yakisobas, parecía una caja sin fondo.


Después vino el turno del Carnaroli viejo caldoso con foie gras y langostino, simplemente espectacular, hay lo dejo.


Y terminamos con algo de carne, una terrina de ternera con tendones de ternera a la Tailandesa, muy rico también.

Como ya os he comentado eran tapitas, así que teníamos hueco para el postre y pedimos un para para probar.
El primero fue una Torrija de brioche con texturas de vainilla y naranja confitada, espectacular.


Y una selección de quesos acompañados con mermeladas, gelatinas y frutos secos.
Me encantan los quesos y terminar una comida con ellos me parece un punto y final ideal de la muerte.


Encasillando
Gourmet low cost

Precio medio por persona: 25 euros

Carrer del Rec, 79
+34 933 19 22 22